Simón Dorado, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Los Mochis, lanzó un llamado urgente a las autoridades para que regulen el crecimiento acelerado de tiendas de origen chino, las cuales advirtió están generando una competencia desleal y afectando gravemente al comercio formal en la región.
El líder empresarial manifestó su preocupación ante la crisis económica que atraviesa el país, señalando que la proliferación de este tipo de establecimientos no es un fenómeno exclusivo de Los Mochis ni de México, sino parte de un problema de escala nacional e incluso global. "Muchos países enfrentan una inundación de productos y comercializadoras chinas, lo que genera una presión sobre los comercios locales que sí cumplen con la ley", dijo.
Dorado criticó que, pese a las condiciones económicas adversas, las autoridades imponen una carga regulatoria cada vez mayor al comercio establecido, mientras que los negocios informales como muchas de estas tiendas operan sin supervisión y sin cumplir con las leyes laborales. "Mientras al comercio establecido le exigen cumplir con nuevas normas como la de las 40 horas o la Ley Silla, estos negocios informales operan sin control y sin ofrecer prestaciones a sus empleados".
El dirigente advirtió que esta situación no solo daña al sector empresarial formal, sino que también perjudica directamente a los trabajadores, quienes al ser empleados en la informalidad pierden acceso a seguridad social, pensiones y otros derechos laborales básicos.
Finalmente, denunció la falta de regulación efectiva y la posible omisión de algunas autoridades, lo que dijo permite que estos negocios operen impunemente. "No digo que el gobierno esté coludido, pero sí hay omisiones graves por parte de ciertas autoridades. Se necesita un marco regulatorio justo que garantice un ?piso parejo? para todos".