Guasave, Sinaloa.- La planta potabilizadora de agua para la ciudad de Guasave se construyó entre 2011 y 2013, pero inició operaciones en julio de 2017, con una inversión de 146 millones de pesos. La planta está diseñada para generar 500 LPS (litros por segundo) y garantizar el suministro y la calidad del agua en los sectores norte y centro de la ciudad.
Sin embargo, las deficiencias en los procesos de cloración de las plantas de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guasave (JUMAPAG), mencionadas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), se remontan a 2016. En un inicio fueron motivadas por robos de tuberías y cableado en los pozos; aun así, la instalación continúa siendo apta para la limpieza y el lavado de manos.
El 8 de junio de 2022, COFEPRIS alertó a la población sobre los riesgos de consumir agua del suministro en Guasave, al no estar debidamente clorada, lo que podría repercutir gravemente en la salud, provocando enfermedades diarreicas e incluso cólera y hepatitis.
Desde años atrás, COFEPRIS ha emitido recomendaciones a JUMAPAG para mejorar el funcionamiento de las plantas potabilizadoras y la calidad del agua. No obstante, a pesar de las observaciones recientes respecto a higiene y limpieza, la autoridad municipal no ha acatado las recomendaciones, según declaró un trabajador de la planta, que pidió no revelar su identidad por temor a represalias.
"Resulta que ya fue la COEPRIS a ver el tema de la contaminación y, aparte, lo que viene siendo la limpieza de la planta; incluso ya ha ido dos veces la COEPRIS y no han atendido el reporte de la solicitud que les está haciendo la COEPRIS. Y la verdad está enmontado: ahí se contamina donde se procesa el agua potable que se distribuye a toda la ciudad."
Mencionó que, tras el inicio de la nueva administración, se llevaron a cabo trabajos de limpieza y mantenimiento. Detalló que el síndico procurador ya está al tanto de la situación y envió a supervisores para revisar el tema y emitir una orden de limpieza de la planta; sin embargo, hasta ahora no se ha llevado a cabo.
Detalló que, en la misma planta, se resguardan los camiones de succión, conocidos como vactors, los cuales, en ocasiones, derraman parte de la contaminación en los suelos donde hay tuberías que filtran el agua hacia las áreas de cloración de la planta.
"Han ido ahí a hacer pruebas del agua y realmente el agua no ha salido como debe salir; sale turbia, sale todo. Es porque realmente hay que trabajar un poco más los temas de cloración, porque hay muchas deficiencias, la verdad, y la gente no se entera porque no van a hacer una supervisión y a checar cómo están las cosas. Por eso muchos sectores se han quejado de la mala calidad del agua."