Gasolineros en alerta por posible cierre del estrecho Ormuz
La tensión geopolítica entre Irán y Estados Unidos ha comenzado a generar preocupación en el sector energético local. Tras los recientes ataques de Estados Unidos a instalaciones nucleares iraníes, el Parlamento de Irán solicitó oficialmente el cierre del estrecho de Ormuz, una vía estratégica por donde transita cerca del 20% del petróleo y gas que se exporta a nivel mundial por vía marítima.
Aunque la medida aún debe ser aprobada por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, la posibilidad de un cierre ha encendido las alarmas en el sector gasolinero de Sinaloa, particularmente por las repercusiones que esto tendría en los precios del combustible.
Heriberto Félix, empresario gasolinero de Los Mochis, advirtió que de concretarse esta decisión, el impacto en el precio de la gasolina podría ser severo.
"Si ya se cerró y no lo abren va a ocasionar un incremento en los precios de petroleo, en todo caso lo que podría pasar es que hubiera escasez de gasolina", señaló.
Explicó que México depende en gran medida de la importación de combustibles, por lo que una interrupción en la distribución mundial de petróleo repercutiría directamente en el mercado nacional.
"Si hay un problema de escasez de petroleo sube mucho el precio, pues va a ser más difícil la importación porque una buena parte del combustible que se consume en México es de importación".
Subrayó que aunque aún es incierto cuánto podría prolongarse esta situación, el impacto dependerá de la duración del conflicto y de las reservas estratégicas con las que cuenten los países exportadores.
El posible cierre del estrecho tendría consecuencias globales. China, principal socio económico de Irán y su mayor comprador de crudo, sería uno de los países más afectados. En 2021, ambas naciones firmaron un acuerdo de cooperación que contempla una inversión china de 400 mil millones de dólares en sectores estratégicos iraníes como energía e infraestructura.
Hasta el momento, no se ha anunciado una respuesta oficial de China, pero la comunidad internacional se mantiene en alerta ante una posible interrupción de los flujos de petróleo que afectaría directamente al mercado energético global.
