"El campo no necesita asistencialismo, sino productividad": CNA
Luis Fernando Haro, director general del Consejo Nacional Agropecuario, enfatizó la importancia de analizar el panorama actual del sector agroalimentario en México, especialmente en un contexto marcado por retos internacionales y nacionales. Además de la necesidad urgente de generar condiciones que otorguen certidumbre a los productores.
Recalcó que producir alimentos debe ser considerado un asunto de seguridad nacional, y sin políticas públicas claras y efectivas que pongan a los productores en el centro, el país corre un riesgo grave en su capacidad para alimentar a su población y a la demanda mundial creciente.
Entre los obstáculos más severos mencionó el cambio climático, con fenómenos como la sequía que afectan directamente la producción. Sin embargo, criticó que México aún no ha adoptado plenamente la modernización necesaria para enfrentar estos retos: "No podemos seguir actuando con modelos obsoletos. La tecnificación del campo, la innovación tecnológica y sistemas de riego eficientes no son opciones, son una obligación para garantizar la supervivencia del sector."
Enfatizó en que solo con la incorporación de tecnologías avanzadas como el mejoramiento genético, el uso de big data, inteligencia artificial y agricultura de precisión se podrá responder a la creciente demanda de alimentos.
Además, llamó al gobierno a dejar de lado programas asistenciales que no generan productividad y a enfocarse en políticas que realmente impulsen la eficiencia y la capacidad productiva del campo.
"El gobierno lógicamente juega un papel fundamental en ese tema, se requieren políticas públicas que vayan enfocadas a elevar la productividad del campo y no pensar en que los programas de apoyo sean más que todo asistenciales y no sean realmente para elevar la productividad del campo y para ser más eficientes en la propia producción de alimentos".
Finalmente, el director general del Consejo Nacional Agropecuario hizo un llamado urgente a la unión de esfuerzos entre el sector privado y las asociaciones de productores, para crear las condiciones que den certeza y respaldo a quienes día a día trabajan en la producción de alimentos. "El tiempo se agota, y de no actuar con decisión, las consecuencias serán irreversibles para México y su seguridad alimentaria," sentenció.