GUAMÚCHIL, SALVADOR ALVARADO. Las promesas de transformación y desarrollo que enarboló la administración de Armando Camacho Aguilar han quedado en el olvido, dejando tras de sí un rastro de obras inconclusas que afectan directamente la calidad de vida de los ciudadanos. A pesar de que su sucesora y esposa, Guadalupe López González, asumió el cargo con el compromiso de concluir estos proyectos, la realidad es que muchas calles siguen en condiciones deplorables, evidenciando una gestión deficiente y una falta de planificación efectiva.
Un caso emblemático es la calle Pedro Juárez en la comunidad de Villa Benito Juárez, donde se anunció una inversión de más de cinco millones de pesos para su pavimentación . Sin embargo, los trabajos no concluyeron.
Además, se han reportado obras que, lejos de resolver los problemas de infraestructura, parecen ser meros "espejismos" para justificar gastos. Tal es el caso de la calle Justa López, entre Margarita Maza y Santos Degollado, donde la pavimentación se realizó de manera superficial, sin atender las verdaderas necesidades de la comunidad.
Esto genera molestias entre los vecinos que ven cómo sus calles permanecen intransitables y llenas de polvo.