La llegada del mes de diciembre representa una oportunidad económica para decenas de mujeres en Los Mochis, quienes cada año se dedican a la elaboración de piñatas navideñas, esta actividad, además de mantener viva una tradición arraigada en la cultura mexicana, les permite obtener ingresos adicionales para apoyar la economía de sus hogares.
La señora Rosa Amelia, elabora piñatas desde los 13 años de edad, explicó que para esta temporada, se prepara con semanas de anticipación con el fin de tener listas las piezas que serán utilizadas en posadas, reuniones familiares y eventos previos a la Noche Buena y Año Nuevo, en su caso, llega a fabricar más de 80 piñatas, desde las tradicionales con ollas de barro y figuras de cartón hasta la estrella de siete picos, la más solicitada por los clientes.
"Tengo de barro, de cartón, de siete conos y de cinco, yo empecé en el mercado San Francisco donde aprendí a elaborarlas , normalmente me preparo con anticipación para tenerlas listas para las posadas" Rosa Amelia, comerciante

Este oficio, que combina creatividad, técnica y dedicación, se convierte en una fuente de sustento fundamental durante diciembre, cuando la demanda aumenta considerablemente, muchas mujeres dedican largas jornadas para cumplir con los pedidos y satisfacer a quienes buscan un elemento esencial en cualquier celebración decembrina.
Además de preservar una de las tradiciones más emblemáticas de nuestro país, las mujeres piñateras contribuyen al movimiento económico local mediante la venta de sus productos en tianguis, mercados y desde sus propios hogares, impulsando así el comercio comunitario en estas fechas.
