El Senado de la República aprobó la reforma a la Ley General del Instituto del Fondo Nacional de Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT) y la envió a la Cámara de Diputados para su discusión. Sin embargo, la propuesta ha generado un fuerte debate entre los legisladores, quienes se han dividido en dos bloques: los que apoyan la reforma y los que se oponen, lo que ha llevado a la suspensión temporal de su discusión.
Entre los puntos clave de la reforma, se destacan las modificaciones al modelo de vivienda social, se convertirá también en constructor de viviendas, con la creación de una empresa filial encargada de gestionar la construcción y mantenimiento de inmuebles, utilizando tanto recursos del presupuesto anual como los propios fondos del instituto.
La iniciativa ha provocado la oposición de representantes de la iniciativa privada, quienes consideran que la reforma permitirá que el INFONAVIT disponga de los recursos de la subcuenta de vivienda, lo que podría poner en riesgo el fondo de ahorro de los trabajadores. Además, advierten que esta medida otorgará un mayor poder al gobierno dentro del instituto, lo que podría derivar en el uso de estos recursos para fines políticos o proyectos del Ejecutivo.
"No nada más los programas, lo pueden usar para meterle a los proyectos como el Tren Maya, el rescate de Pemex, lo pueden usar tal cual como si lo tuvieran en la bolsa ese es el gran riesgo", señaló Roberto Miranda Largada, presidente de la Cámara Nacional de la Industria (Canacintra).
Por su parte, José Ramos, presidente de la Coparmex en Los Mochis, señaló que la pausa en la discusión de la reforma brinda una oportunidad para socializar el tema con la ciudadanía, ya que considera que es un asunto que afecta a todos los mexicanos.
"Ojo todos los trabajadores de México, a ellos les va a afectar esta reforma y yo creo que aún cuando hayan votado por Morena, yo creo que es un tema que se debe socializar porque es un tema que se pone en riesgo su retiro, lo más importante que podemos tener", enfatizó.
