Las 11 presas que abastecen de agua al estado de Sinaloa se encuentran en niveles alarmantes, con apenas un 6.2% de su capacidad total. Esta crítica situación ha provocado que, día con día, más comunidades se sumen a la creciente lista de zonas sin acceso regular al agua potable.
De acuerdo con la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable de Sinaloa, el programa emergente ProAgua 2025 brinda actualmente atención a 226 comunidades en distintos municipios, beneficiando a más de 104 mil personas que dependen del suministro de agua mediante pipas.
"Muchos de ellos tienen infraestructura pero no les alcanza , ahí es donde nosotros reforzamos , hemos llevado 46 unidades que las tienen allá de manera permanente , cada una de las unidades tiene la capacidad de 10 mil litros " María Inés Pérez, Secretaria de Bienestar y Desarrollo Sustentable de Sinaloa
Uno de los municipios más afectados es Choix, donde 56 localidades rurales y 9 colonias de la cabecera municipal enfrentan una crítica escasez de agua.
En el municipio de Ahome, siete comunidades están en la misma situación. En el campo pesquero El Colorado, el canal que abastece la planta potabilizadora ha bajado tanto que el servicio es casi inexistente, no obstante esta situación se ha vuelto recurrente.
"Este problema no es de ahorita, lo hemos tenido siempre , todo el tiempo hemos batallado por el agua" Habitante de El Colorado
Para muchos la vida cotidiana se ha transformado en una carrera de resistencia, las familias deben organizarse para distribuir el recurso, priorizar su uso e incluso renunciar a prácticas básicas de higiene, lo que ha generado la aparición de enfermedades.
En tan solo un año, el número de comunidades que requieren el abasto de agua mediante pipas ha aumentado en un 47.95 %, una cifra alarmante que refleja la rapidez con la que la sequía avanza en el estado.
Mientras, las presas continúan vaciándose y las lluvias no llegan, la esperanza de miles de familias está puesta en las pipas y en programas emergentes. Pero el llamado es urgente: el agua se agota en Sinaloa, y el tiempo también.