Aunque las temperaturas comienzan a descender y, con ello, disminuye el uso de aires acondicionados en los hogares, esta reducción en el consumo eléctrico no se ha visto reflejada en los recibos emitidos por la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Por el contrario, cada vez son más los usuarios que denuncian cobros excesivos que califican como injustos y desproporcionados.
Lorena Rojas, una de las usuarias afectadas, señaló que en su hogar, habitado únicamente por tres personas, los montos a pagar en el recibo son cada vez más altos, a pesar de tener un consumo moderado.
"Pues somos tres personas las que estamos ahí habitando la casa y si el recibo pues si nos llega cargado, si nos llega a veces, ahorita yo vine a pagar casi cuatro mil pesos, entonces pues si, si tenemos un aire prendido, la televisión así, que si se me hace mucho".
Además del impacto económico, la situación representa un riesgo para el bienestar familiar. Rojas relató que, debido a un descuido en la entrega del recibo, no pudo pagar a tiempo, y su servicio estuvo a punto de ser suspendido.
"No me llegó el recibo a mi domicilio y ayer fueron a cortarme la luz. Afortunadamente, el trabajador fue considerado porque vio que había una bebé recién nacida y no la cortó, pero tuve que venir a pagar los cuatro mil pesos completos".
Casos como el de Lorena se han vuelto cada vez más comunes. Usuarios aseguran que los montos se han disparado, en algunos casos al triple de lo habitual, sin que exista una justificación clara. Además, señalan que, pese a los altos cobros, los apagones y fallas en el servicio continúan siendo frecuentes.
La inconformidad crece entre la ciudadanía, que exige transparencia en la facturación y una revisión urgente a las tarifas eléctricas, sobre todo en contextos donde el consumo debería disminuir por razones estacionales.