A orillas del Mar de Cortés y con una vista privilegiada , el puerto de Topolobampo está escribiendo un nuevo capítulo en su historia, luego de su reciente designación como uno de los 14 Polos de Desarrollo para el Bienestar en México.
Su inclusión se sustenta en su ubicación geográfica ya que cuenta con acceso marítimo, ferroviario, carretero y aéreo, lo que facilita su integración a cadenas logísticas tanto a nivel nacional como internacional.
Pero ¿Qué significa que Topolobampo sea uno de los nuevos polos de desarrollo económico del país?
De acuerdo con el Gobierno Federal la ambiciosa estrategia busca fomentar la inversión productiva, generar empleos de calidad y reducir las desigualdades económicas y sociales.
Como parte del plan, Topolobampo será beneficiado con incentivos fiscales, mejoras en infraestructura y acompañamiento institucional. El objetivo es atraer inversiones en sectores estratégicos como la agroindustria, la petroquímica, la logística, energía y la electro movilidad, una noticia que ha sido bien recibida por el sector industrial.
" Es algo que nos va a ayudar a seguir el camino que ya se ha ido trazando en el desarrollo de la industria, el poder abrir otro nicho de empleo y de inversiones que ayuden al desarrollo de la región" Roberto Miranda, Presidente de Coparmex en Los Mochis
Entre los proyectos que destacan se encuentra Pacífico Mexinol, con una inversión de 3 mil 300 millones de dólares para la producción de metanol verde, GPO, que contempla una planta de amoniaco y Tango Solar, una planta enfocada en la generación de hidrógeno verde, con una inversión de mil 172 millones de dólares.
Sin embargo, mientras autoridades locales celebran esta nueva etapa de desarrollo, la situación ha reavivado la preocupación e incertidumbre entre las comunidades indígenas, que durante años han resistido la presencia de industrias con alto potencial contaminante.
"Quedaríamos en una zona industrializada y de alto riesgo, con toda la petroquímica instalada directamente en el puerto de Topolobampo. Estamos hablando de una bomba petroquímica en un espacio tan reducido, donde el equilibrio ecológico es extremadamente frágil", expresó Claudia Quintero, habitante de la comunidad de Ohuira.
Habitantes insisten en que el crecimiento económico no debe darse a costa del medio ambiente. Por ello, exigen que todas las obras e instalaciones se ajusten estrictamente a las normativas ambientales vigentes, y que se garantice la protección de los ecosistemas de la región.