El traslado de sustancias peligrosas está normado en México; sin embargo los accidentes han sido una constante tanto en zonas urbanas como en carreteras, lo que representa un riesgo permanente para la población.
A decir de Carlos Jiménez Palacios, director de daños y automóviles de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, "hay algunos tipos de mercancía que por su nivel de riesgo, requieren o se alinean a regulaciones específicas, este es uno de ellos, el transportar, el almacenar, el distribuir o tener un expendio de hidrocarburos".
La última modificación al Reglamento para el Transporte Terrestre de Materiales y Residuos Peligrosos data del 20 de noviembre de 2012, diez días antes de que Felipe Calderón Hinojosa dejara la Presidencia de la República.
El reglamento obliga a empresas dedicadas al transporte de sustancias y residuos peligrosos a contar con mecanismos mínimos de seguridad de sus unidades y contenedores, así como de la capacitación de sus operadores.
Además establece como obligatorio contar con pólizas de seguro "individual o en conjunto del transportista y del expedidor de la substancia, material o residuo peligroso".

La Norma Oficial Mexicana sobre materiales peligrosos atiende la clasificación de la Asociación Nacional para la Protección contra Incendios de Estados Unidos e identifica nueve clases de sustancias sólidas, líquidas y gases que pueden representar riesgos a la salud y al medio ambiente.
A partir de esta norma se establecen criterios particulares para el manejo, almacenamiento y transportación de dichas sustancias y materiales.
Esto significa que los vehículos de carga deben cumplir también con requerimientos técnicos específicos, además de estar en óptimas condiciones físicas y con choferes capacitados.
Carlos García Álvarez, vicepresidente de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (AMOTAC), dijo que "la falta de responsabilidad que no se ha asumido, desde de quien emanan las normas y reglamentos que es la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), hay muchas normas y reglamentos, pero hay muchos puntos de revisión donde la corrupción impera".
En este sentido, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), dependiente de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, es la instancia federal responsable de vigilar que las empresas dedicadas al transporte de este tipo de materiales y sustancias, cumplan con la normatividad para un traslado seguro tanto en vías federales como dentro de las zonas urbanas, pero no realiza las supervisiones necesarias.
Amenazas sobre el asfalto
El transporte de carga es una necesidad económica; se requiere mover diariamente toneladas de mercancías y sustancias, pero representan un riesgo permanente en calles, avenidas y carreteras y que cada año provocan miles de accidentes y cientos de muertes.
En las carreteras de México cada día suceden de ocho a diez accidentes que involucran camiones de carga.

Sólo en 2023 ocurrieron doce mil 099 accidentes en vías federales; en tres mil 233 estuvieron involucrados vehículos de carga que provocaron 345 muertes y lesiones a mil 012 personas.
Cuatro de cada cinco accidentes son responsabilidad de los conductores.
En estos percances estuvieron involucrados cuatro mil 749 unidades de transporte y los daños materiales se estimaron en un millón 42 mil pesos, según la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes.
Y lo que falta es mayor prevención, a decir de Carlos García Álvarez, vicepresidente de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (AMOTAC).
"Y también el mantenimiento preventivo de muchas empresas, se nota a miles de kilómetros, principalmente por el deterioro por las malas condiciones de las carreteras, el desgaste de los dobles remolques".
Aunque cualquier accidente representa un riesgo para la vida, el medio ambiente y la infraestructura carretera, los percances que involucran materiales y sustancias peligrosas elevan los peligros y los daños.

De acuerdo con reportes de la Guardia Nacional y de medios de prensa, entre enero y septiembre de 2025, la autopista México-Puebla ha sido escenario de ocho accidentes donde pipas de carga han estado involucradas con un saldo de nueve personas fallecidas y 70 más lesionadas, además del cierre de la vialidad durante varias horas.

Según el Anuario Estadístico de Colisiones en Carreteras Federales 2023, elaborado por el Instituto Mexicano del Transporte, la mayoría de los accidentes son por la falta de pericia, irresponsabilidad o cansancio de los conductores.
Carlos Jiménez Palacios, director de daños y automóviles de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, "quien transporta esa mercancía, independientemente de lo que lleve, es un vehículo automotor, un vehículo motorizado que tiene una adaptación, en este caso un cilindro que se le conoce como la pipa, podría no ser una pipa, no deja de ser un vehículo".
Por eso el gobierno federal expide una licencia especial para choferes que deben acreditar conocimiento y experiencia, someterse a exámenes físicos y médicos y atender a medidas de supervisión en los puntos carreteros.
Apenas el 5 de septiembre de 2025, la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (AMOTAC) alertó que las autoridades federales habían suspendido los programas de exámenes médicos y antidoping.
Eso sin contar con la falta de registros de investigaciones abiertas por las autoridades por probables casos de corrupción en los puntos de revisión, para evitar que un chofer sea sometido a estas pruebas.
Nuevas reglas
Ante recientes incidentes, las autoridades de la Ciudad de México y del Gobierno Federal impusieron nuevas reglas para el traslado de sustancias peligrosas, con la esperanza de que realmente reduzcan la probabilidad de accidentes.
Transportar materiales y sustancias peligrosas obliga a empresas a contar con seguros para garantizar responsabilidad civil y ambiental ante cualquier accidente.
Al respecto, Carlos Jiménez Palacios, director de daños y automóviles de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), dijo que los vehículos de carga "para el traslado de mercancías, donde la mercancía o el traslado de la mercancía, puede generar un daño a un tercero, eso nos conlleva a la posibilidad de un seguro de responsabilidad civil por el giro del transporte de la mercancía"

De acuerdo con la AMIS, los transportes de carga deben contar con al menos cuatro tipos de coberturas, tres por responsabilidad civil y uno más de responsabilidad ambiental que impone la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente, dependiente de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
"Son coberturas que por la naturaleza del riesgo que se cubre, no siempre pueden encontrarse juntas; ¿pueden encontrarse empaquetadas?, sí, tú puedes contratar la del vehículo con una empresa, que tenga posibilidad de empaquetar cobertura de daños y autos", agregó Carlos Jiménez Palacios, de la AMIS.
Aunque son obligatorios los seguros por transporte de mercancías y el de sustancias y materiales peligrosos y daño ambiental, el seguro de responsabilidad civil del vehículo no es obligatorio en todo el país y es facultad de estados y municipios establecer las normas al respecto.

Esto significa que los accidentes de este tipo de vehículos en zonas urbanas representan un mayor riesgo para eventuales víctimas en caso de incidentes, además de que las autoridades locales tienen menos capacidad de reacción y supervisión de vehículos de este tipo.

Tras el accidente en Iztapalapa el 10 de septiembre de 2025, el Gobierno de la Ciudad de México estableció nuevos lineamientos para vehículos de carga que circulen por capital para reducir los riesgos.
El 2 de octubre de 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum también anunció nuevas reglas para el transporte y traslado de gas LP, en vías federales, para reducir los riesgos de accidentes.
Ante esto, especialistas advierten que deben homologarse los marcos normativos en todos estados y endurecer sus sistemas de supervisión de todas las unidades de transporte de carga, especialmente aquellas que transportan materiales y sustancias peligrosas, para verificar que cuenten con la documentación, medidas de seguridad y pólizas de seguro.
