Descubre la riqueza de Santa Ana Maya

Ubicado a tan solo una hora de Morelia, junto al Lago de Cuitzeo, se encuentra el pintoresco municipio de Santa Ana Maya, un lugar que guarda siglos de historia, cultura y tradiciones.

En tiempos prehispánicos, la región fue habitada por los tarascos, quienes llamaron a este lugar Sitquije, que significa "Tierra Fértil", en referencia a la riqueza de sus tierras y la abundancia de agua.

El 2 de enero de 1555, la población fue oficialmente fundada con el nombre de Santa Ana Sitquije, cambiando posteriormente a Santa Ana Maya. Algunos cronistas señalan que el nombre "Santa Ana" se debe a la advocación a la madre de la Virgen María, mientras que "Maya" hace referencia a su geografía, marcada por arroyos, manantiales y ojos de agua que aún embellecen la región.

En 1868, Santa Ana Maya logró la autonomía como municipio, separándose de Cuitzeo.

Su Parroquia, ubicada en el corazón del pueblo, fue construida durante la época colonial. A lo largo de los años, ha sido objeto de varias remodelaciones, que incluyen mobiliario, el campanario y la restauración de murales que narran la historia de la comunidad.

Los habitantes celebran con fervor sus fiestas patronales cada 26 de julio, en honor a Santa Ana, manteniendo viva la devoción religiosa y las tradiciones locales.

La tradición panadera de más de 100 años continúa siendo un sello distintivo del municipio. Entre sus delicias más emblemáticas destacan las quesadillas de pan hojaldrado bañadas en miel de piloncillo.  La leyenda cuenta que inicialmente eran llamadas "Casadillas", al ser un postre que se repartía como ofrenda en las bodas. Con el paso del tiempo su nombre sería adaptado a quesadillas. La tradición de ofrecer las deliciosas quesadillas en las bodas, perdura hasta el día de hoy., 

En la plaza principal, hay cuantiosos carritos de madera en donde puedes probar el autentico sabor de Santa Ana Maya. 

¿Vamos por unas quesadillas?