La historia del Instituto Tecnológico de Nogales es, al mismo tiempo, la historia del desarrollo industrial y económico de la frontera norte. Fundado el 1 de octubre de 1975, el plantel nació del impulso de un grupo de jóvenes visionarios y del respaldo federal en una época en la que México apostaba por la educación tecnológica como motor del progreso regional.
En 1974, estudiantes del CECyT No. 143 encabezaron las gestiones ante el Gobierno de la República para establecer un Instituto Tecnológico en Nogales. Su meta era clara: formar profesionistas que respondieran a la creciente demanda de mano de obra calificada de la industria maquiladora, que se expandía en la ciudad durante la década de los setenta. durante la ceremonia de 50 aniversario de fundación del Tec, conocimos a uno de los estudiantes que en aquel tiempo gestiono ante el presidente Luis Echeverría una institución de nivel superior, el hoy ingeniero Luis armando Bojórquez tenía 17 años.
El 20 de octubre de 1974, durante una visita del presidente Luis Echeverría Álvarez al Cinema Nogales 70, el mandatario aceptó la propuesta, dando paso al acta compromiso firmada por autoridades y estudiantes, con la participación del Ing. César Uscanga Uscanga, subsecretario de Educación Tecnológica, y el Arq. Gustavo Aguilar Beltrán.
Así, el 1 de octubre de 1975 iniciaron las actividades del Instituto Tecnológico Regional de Nogales, convirtiéndose en el plantel número 34 del país. Y del que han egresado más de 15 mil profesionistas, El Tecnológico abrió sus puertas con tres programas académicos: Técnico en Electromecánica, Técnico en Electrónica, y Licenciatura en Administración de Empresas. Con el paso de los años, la oferta se amplió a Ingeniería Industrial en Producción, Administración Turística, Ingeniería Civil y otras especialidades que fortalecieron la formación de cuadros técnicos y profesionales indispensables para la competitividad de Nogales.
3 mil 97 jóvenes hoy en día estudian en la emblemática institución que ha sido clave en la transformación económica y social de la ciudad, al convertirse en proveedor de talento para el sector maquilador y de servicios, uno de los pilares del empleo local y regional.