En México, la falta de educación de higiene ha llevado a una serie de problemas de salud y ambientales, incluyendo la proliferación de basureros clandestinos. En cada ciudad de este país, ya sea en menor o mayor escala padecen de este problema de los basureros dentro de la mancha urbana, pero es un mal que la misma ciudadanía ha ocasionado inlcuso alrededor de sus propios hogares. Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en 2020, solo el 45% de los hogares mexicanos tienen acceso a servicios de recolección de basura adecuados. Además, el 70% de los municipios mexicanos no tienen un plan de manejo de residuos sólidos. De acuerdo a un estudio realizado por la Organización de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (ONU Medio Ambiente) en 2020, México es uno de los países con más basureros clandestinos en América Latina. En México, se estima que hay más de 10.000 basureros clandestinos, lo que representa un riesgo para la salud y el medio ambiente. Estos depósitos de basura ilegales pueden contaminar el agua, el aire y el suelo, y también pueden ser un caldo de cultivo para enfermedades. De acuerdo a un estudio realizado por la organización no gubernamental (ONG) Amigos de la Tierra en México en 2020 existen más de 100 grupos comunitarios y de la sociedad civil que trabajan en la protección del medio ambiente, en Nogales existe Ecobarrio un grupo ecologista que ayuda en esta frontera. En esta frontera el problema de los tiraderos ilegales de basura ya pasa de la ignorancia al cinismo.