En lo que va del mes de julio, Meganoticias ha informado sobre un sinnúmero de casos de maltrato animal en toda la República Mexicana, donde incluso personas de la tercera edad han sido señaladas por agredir a perros
Un caso denunciado ocurrió en la comunidad de Zacatzingo, municipio de Zacatlán, Puebla, donde se reportaron 18 denuncias penales por maltrato animal.
La violencia ha escalado tanto que, en Querétaro, algunos elementos municipales fueron dados de baja tras comprobarse casos de maltrato a animales por parte de estos trabajadores.
El maltrato no solo se limita a golpes: en Veracruz, un hombre fue captado arrastrando a su perro con una cuerda amarrada a una camioneta en movimiento, generando gran indignación.
En Guadalajara, trascendió que una exfuncionaria del Ayuntamiento confesó en una transmisión en vivo por TikTok haber sacrificado a un perro como parte de un ritual de santería para "quitarse a sus enemigos del camino".
La realidad es que, sea cual sea la forma o el motivo, el maltrato animal está ocurriendo. Aquí te contamos qué dice la ciencia al respecto sobre estas conductas y por qué algunas personas actúan así
¿Qué nos dice la ciencia sobre estas conductas?
Según un estudio del Instituto Belisario Domínguez del Senado, el 69.8 % de las mascotas en México, es decir, siete de cada diez, sufren algún tipo de maltrato. Esto se traduce en millones de perros, gatos y otras mascotas pequeñas afectadas en todo el país.
Los estudios en psicología y psiquiatría sugieren una fuerte relación entre el maltrato animal y ciertos trastornos de personalidad. En particular, el trastorno antisocial de la personalidad, caracterizado por patrones persistentes de desprecio por los derechos de otros, aparece recurrentemente en estos casos.
Un análisis del Observatorio de Violencia Hacia los Animales evaluó 52 casos forenses y encontró que el 85 % de los agresores tenía diagnóstico de trastorno antisocial, y el 89 % contaba con antecedentes por delitos violentos como homicidio o agresión sexual.
Se explica que quienes maltratan animales por placer suelen mostrar falta de empatía y que estos comportamientos están vinculados a trastornos antisociales. Además, estudios internacionales corroboran que la crueldad animal durante la infancia puede predecir futuros trastornos de conducta y violencia contra personas.
Un artículo de AnimaNaturalis describe esta conducta como parte de una "cascada de violencia", un ciclo que afecta tanto a individuos como a sociedades enteras, en donde la violencia contra animales puede escalar a violencia humana
Leyes y retos en su aplicación
Desde el punto de vista legal, 28 de las 32 entidades federativas mexicanas tipifican el maltrato animal como delito, con penas que van desde multas hasta seis años de prisión.
Sin embargo, la aplicación de estas leyes es limitada: apenas el 0.01 % de los casos recibe sanción efectiva. Aunque la visibilización en redes sociales ha impulsado cambios legislativos, la falta de recursos y denuncias reduce su alcance.
Acciones para un cambio real
Diversas organizaciones trabajan para combatir este problema. Igualdad Animal México realiza investigaciones encubiertas y campañas para disminuir el sufrimiento animal, mientras que APASDEM promueve adopciones responsables y esterilizaciones.
A nivel gubernamental, el Estado de México impulsa campañas de adopción, esterilización y vacunación, y la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Ciudad de México atiende denuncias y rescata animales desde 2005.
En cuanto a la rehabilitación de agresores, los programas aún son limitados, pero hay iniciativas como las de "Ayudemos a los Jóvenes" y el Colegio de Psiquiatras en Mazatlán, que ofrecen atención psicológica gratuita para prevenir que la violencia escale.
Cambiar esta realidad requiere más que leyes; implica transformar mentalidades fomentando empatía y respeto hacia quienes no tienen voz