La palabra urbanismo se refiere al conjunto de conocimientos, estrategias y acciones dedicadas a la organización, planificación y diseño de espacios urbanos, con el propósito de garantizar ciudades más habitables, funcionales y sostenibles. En esencia, el urbanismo aborda cómo se distribuyen los edificios, las vías de circulación, los espacios públicos, el uso del suelo y los servicios, para responder a las necesidades de los habitantes.
Nogales ha comenzado a adaptarse, tanto a nivel municipal como estatal, a nuevas reglas que apuntan a un desarrollo urbano más ordenado, resiliente y sostenible. Esta adaptación implica la actualización de regulaciones, la promoción del uso de suelo mixto y una mayor visión de conectividad vial, lo que marca una transición lejos del crecimiento desordenado hacia un modelo más deliberado.
El crecimiento poblacional de Nogales es un indicador clave de la urgencia para implementar un urbanismo adecuado: según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la población del municipio ascendió a 264 782 habitantes en 2020, lo que representa un aumento del 20.2 % respecto a 2010. Este dinamismo demográfico demanda una infraestructura urbana que acompañe la expansión. En respuesta, el municipio actualizó sus instrumentos de planeación urbana: por ejemplo, en febrero de 2018 se publicó la versión del Programa de Desarrollo Urbano del Centro de Población de Nogales, Sonora (versión 2017), cuyo objetivo es establecer "una ciudad compacta y policéntrica? con políticas, normas y estrategias para la ocupación ordenada del suelo".
En cuanto a regulación y normatividad, el Gobierno del Estado de Sonora mediante el boletín oficial señaló que se trata de "una reforma integral a la planeación y el desarrollo de Nogales, que incorpora las más efectivas políticas y técnicas urbanísticas para la prevención y reducción de inundaciones, de contaminación, de emisiones de carbono, de la huella ecológica, y de las islas de calor, por medio de estrategias de infraestructura verde, de cosecha de agua pluvial, de fomento de alternativas de movilidad". Este tipo de marco legal muestra que las autoridades locales están alineándose con criterios de sostenibilidad urbana.
Un aspecto clave del nuevo urbanismo en Nogales es el fomento del uso de suelo mixto, es decir, la integración de vivienda, comercio, trabajo y servicios en un mismo entorno, lo que favorece reducir los desplazamientos largos y la dependencia del automóvil. Nogales se encuentra en un momento clave de transición urbana. Al pasar de un modelo expansivo y poco regulado a uno más estratégico, conectado e integrado con las directrices estatales y federales, la ciudad busca convertirse en un espacio más habitable y sostenible.