La industria porcina en el sur de Sonora atraviesa una de sus peores crisis en años, con consecuencias directas sobre el empleo local, de acuerdo con Guillermo Peña Enríquez, líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Navojoa, la situación ha derivado en el despido de alrededor de mil trabajadores, afectando de manera directa a decenas de familias en la región.
Algunas granjas han cerrado completamente, otras han cambiado de giro, pero en casi todos los casos, la mayoría del personal ha sido despedido, advirtió que la falta de políticas públicas de respaldo ha dejado a la industria en una situación de vulnerabilidad extrema.
Según datos de la CTM, en Navojoa había hasta hace poco 20 empresas del ramo porcino afiliadas al sindicato, pero la mitad de ellas se ha retirado debido a la crisis. Mientras algunas han cesado operaciones por completo, otras han optado por cambiar su actividad económica, prescindiendo de la mayoría de sus trabajadores.
Las causas principales de esta problemática, según lo han manifestado los propios empresarios, son la falta de apoyos por parte del gobierno y las condiciones desfavorables del mercado, que han encarecido insumos y reducido la rentabilidad del negocio.
El impacto de estos cierres va más allá del número de empleos perdidos, muchas de las familias afectadas dependían completamente de estos trabajos.