Dos meses de plantón y ninguna solución para el pueblo Yoreme

A dos meses de haber iniciado el plantón frente a las oficinas regionales del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) en Etchojoa, líderes de la Asamblea de Unidad del Pueblo Yoreme mantienen firme su postura: no se moverán hasta que sus demandas históricas por territorio, agua y desarrollo integral sean atendidas de manera real y efectiva.

Isidro Gocobachi Valenzuela, jefe tribal; Indalecio Alcántar Neyoy, coordinador de consejeros tribales, y Bartolo Valencia Mátuz, presidente del Consejo Supremo de Cobanaros, señalaron que el movimiento no es reciente, sino el resultado de décadas de omisión y abandono institucional.

"Estamos aquí por nuestros derechos, porque la tierra no es negociable y el agua es vida para nuestro pueblo", expresaron en conferencia desde el campamento instalado a un costado de la Coordinación Regional del INPI.

Aseguraron que, si bien se han iniciado mesas de diálogo, las soluciones de fondo siguen sin concretarse.

Los representantes indígenas denunciaron que, aunque el Gobierno Federal lanzó el Plan de Justicia Yoreme-Mayo en 2022, muchos de los compromisos siguen sin cumplirse.

En sus exigencias, además de la restitución de tierras y derechos sobre el agua, también se incluyen necesidades urgentes en salud, educación, vivienda, caminos, agricultura, empleo, así como mayor apoyo a los centros ceremoniales y la preservación de su cultura y tradiciones como la música y danzas de pascola, venado y matachín.