Tras décadas de historia y pasión, los Mayos de Navojoa dejan la ciudad para iniciar una nueva etapa en Tucson, Arizona, marcando un termino sin precedentes en la Liga ARCO Mexicana del Pacífico (LAMP).
El anuncio oficial se dio este martes durante una rueda de prensa en la que también se confirmó la incorporación de los Jaguares de Nayarit como nueva franquicia, sin embargo, la atención se centró en la sorpresiva mudanza del histórico club Mayos de Navojoa.
"No fue una decisión fácil ni de un solo año", reconoció entre emociones contenidas Víctor Cuevas, propietario del equipo, quien explicó que problemas financieros, falta de patrocinio y la disminución en el respaldo de la afición fueron factores decisivos.
La salida de los Mayos no solo representa una pérdida deportiva, sino también un golpe emocional y cultural para Navojoa, una ciudad que vio nacer y crecer a la franquicia desde 1959.
Según Salvador Escobar, presidente ejecutivo de la LAMP, Tucson se perfila como la nueva sede, lo cual representa un reto importante en logística, calendarios y adaptación del equipo a un nuevo entorno cultural y deportivo.
La franquicia tendrá un nuevo nombre y buscará construir una nueva identidad con la comunidad estadounidense:
A pesar del anuncio, persiste un sabor amargo en la ciudad, Escobar reconoció que hay compromisos pendientes con el gobierno de Sonora, principalmente en temas de fomento deportivo y desarrollo de talentos.
La salida de los Mayos deja a Navojoa sin representación profesional en la Liga del Pacífico, generando inquietud entre los fanáticos y jóvenes peloteros de la región que ahora ven más lejano el sueño de jugar béisbol de alto nivel en su tierra natal.
Con este movimiento, la Liga ARCO incursiona por primera vez en Estados Unidos, abriendo nuevas oportunidades de mercado, pero también dejando una huella imborrable en el sur de Sonora.