Aunque la obra civil del nuevo Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya fue concluida, su apertura podría retrasarse hasta principios de febrero, según información proporcionada por integrantes del Comité Ciudadano de Seguimiento y Testimonio Social del organismo.
Obra terminada, pero pendiente el equipamiento
Durante la más reciente reunión con la delegada estatal del IMSS, se informó que el inmueble un hospital de segundo nivel con 90 camas, 20 especialidades y una extensión de 20 mil metros cuadrados? se encuentra completamente terminado en su estructura. Sin embargo, el equipamiento médico continúa en proceso, con aparatos que requieren periodos específicos de calibración y prueba antes de ponerse en marcha.
Guillermo Peña Enríquez, dirigente de la CTM en Navojoa e integrante del Comité Ciudadano, explicó que esta fase técnica es clave para definir la fecha de apertura.
"Ya fue entregada la obra civil. Lo que queda pendiente son equipos médicos que necesitan un periodo de prueba para poder operar correctamente, y eso podría tomar alrededor de un mes. Por ello, se estima que entre enero o principios de febrero ya pueda empezar a funcionar una parte del nuevo hospital", señaló.
Déficit de especialistas: el reto mayor

Además de la etapa de equipamiento, otro desafío es la contratación de médicos especialistas. Peña Enríquez subrayó que sin este personal, el hospital no podrá ofrecer la capacidad de atención que demanda la región, donde más de 133 mil derechohabientes del sur de Sonora dependen de los servicios de segundo nivel.
"El IMSS necesita un esquema de incentivos que motive a los especialistas a quedarse en Navojoa. Hoy gran parte de la carga laboral está en Ciudad Obregón, que incluso atiende pacientes de otros estados. Navojoa debe resultar atractivo para que los médicos decidan establecerse aquí", puntualizó.
Mejoras en el viejo hospital, pero persisten carencias
Mientras se concreta la apertura del nuevo nosocomio, el actual hospital del Seguro Social en Navojoa continúa con trabajos de rehabilitación. No obstante, usuarios y personal médico señalan que el edificio enfrenta serias carencias, tanto en infraestructura como en especialidades.
Un ejemplo crítico es la ausencia de cardiólogo, una situación que lleva varios meses desde la renuncia del último especialista, afectando a pacientes que requieren atención continua o urgente.
Perspectiva hacia 2026
Las autoridades del IMSS han señalado que con la entrada en operación del nuevo hospital y la rehabilitación del existente, se proyecta que en 2026 la región cuente con mejores condiciones de atención médica.
Sin embargo, la comunidad y representantes sociales insisten en que la mejora en servicios dependerá no solo de edificios nuevos, sino del personal médico suficiente y capacitado, además de una estrategia que permita evitar la fuga de especialistas.