Este sábado, por tercera ocasión en lo que va del año, el basurón municipal volvió a arder, generó preocupación entre autoridades, vecinos y activistas ambientales.
Aunque el incendio fue controlado rápidamente por cuerpos de emergencia, el hecho pone de nuevo sobre la mesa un tema que ha dejado de ser una excepción para convertirse en una constante.
La Unidad Municipal de Protección Civil informó que el fuego fue atendido de forma oportuna y ya se encuentra bajo control.
En el lugar trabajaron las unidades C1, M18 y R9, con apoyo de elementos de Seguridad Pública, quienes resguardaron la zona para evitar el paso de personas y permitir las maniobras de sofocación.
No se reportaron personas lesionadas, pero sí un creciente malestar entre vecinos de colonias cercanas, quienes nuevamente tuvieron que lidiar con el humo que invade sus hogares y con la incertidumbre de vivir cerca de un foco de riesgo ambiental.
Los incendios en el basurón frecuentemente señalados como intencionales han generado múltiples llamados a las autoridades municipales para implementar medidas de control, vigilancia y manejo adecuado de residuos.
La recurrencia de estos siniestros no solo afecta la calidad del aire, sino que también pone en riesgo la salud de cientos de familias, además de impactar negativamente en el medio ambiente.