A una semana del cierre temporal del Mercado Municipal, ordenado por la Unidad de Protección Civil debido a fallas de seguridad relacionadas con el cableado eléctrico en riesgo inminente, la actividad económica dentro del histórico inmueble continúa sin recuperar su ritmo habitual. Comerciantes de distintos giros aseguran que las pérdidas fueron cuantiosas y que la recuperación aún luce lejana.
Un cierre en fechas clave
El cierre, que se prolongó durante varios días, coincidió con fechas de alta demanda para los locatarios. Este factor agravó el impacto económico para vendedores de alimentos, abarrotes, artículos tradicionales, dulcerías y puestos de temporada que esperaban una importante afluencia de clientes.

Muchos comerciantes señalan que habían invertido en mercancía con anticipación, confiando en un flujo constante de compradores que finalmente no llegó. El cierre temporal frenó por completo las ventas y dejó a varios locales con inventarios abultados y riesgos de pérdidas, especialmente en productos perecederos o de baja rotación.
La reapertura no trajo el repunte esperado
A pesar de que el mercado reabrió sus puertas tras cumplir con las adecuaciones exigidas por Protección Civil, la recuperación económica no se ha reflejado en los ingresos diarios. Los locatarios coinciden en que la afluencia de clientes sigue por debajo de lo habitual, lo que mantiene las ventas en niveles muy bajos.
Algunos comerciantes reportan que ciertos productos quedaron rezagados, y debido a su naturaleza ya sea estacional, festiva o perecedera probablemente no logren venderse sino hasta el próximo año, representando pérdidas directas para sus negocios.

Más factores que afectan las ventas
De acuerdo con testimonios recabados entre los locatarios, el golpe económico no se debe únicamente al cierre. Muchos señalan que el comercio desleal en los alrededores ha restado clientes al mercado, aun en días normales. Además, el cierre de casetas dentro del propio inmueble provocó que parte del producto quedara "varado", sin posibilidad de ser trasladado o vendido durante los días que se mantuvo inactivo.
Preocupación por el futuro
Aunque los comerciantes reconocen la importancia de atender las fallas estructurales y eléctricas para garantizar la seguridad de todos, aseguran que necesitan apoyo urgente para recuperarse de esta baja.
Por ahora, mientras los pasillos del Mercado Municipal lucen más tranquilos de lo habitual, los comerciantes se mantienen a la espera de que los clientes regresen y de que el histórico recinto vuelva a ser el punto de encuentro comercial que caracteriza su tradición.