Alejandro Guevara Sanginés, rector de la Universidad Iberoamericana Puebla, señaló que los gobiernos de los tres niveles han quedado a deber a la ciudadanía en materia de seguridad, al advertir que, pese a la implementación de operativos relevantes, la infiltración de la delincuencia dentro de las propias instituciones ha comprometido el correcto desempeño de las corporaciones.

"Nos queda mucho a deber el estado, entiendo las complejidades que implica la atención al crimen, porque está involucrado con temas de crimen organizado y cómo los tentáculos del crimen organizado han permeado hacia estructuras de gobierno, me refiero a gobierno en los 3 niveles, municipal, estatal, federal incluso" Alejandro Guevara Sanginés / Rector Ibero Puebla
El señalamiento ocurre en un contexto en el que cifras oficiales del Sistema Nacional de Seguridad Pública han reportado que Puebla se mantiene entre los estados con alta incidencia en delitos de alto impacto como homicidio doloso, extorsión y robo con violencia, especialmente en corredores como la zona metropolitana y el llamado "triángulo rojo".
En Puebla, diversos operativos coordinados entre fuerzas estatales, Guardia Nacional y ejército han sido desplegados durante los últimos años, particularmente contra el robo de hidrocarburos y el narcomenudeo; sin embargo, casos documentados de detenciones de policías vinculados con grupos criminales han evidenciado fallas en los controles de confianza y la supervisión interna.
El rector afirmó que, desde la trinchera universitaria, en conjunto con instituciones como la UPAEP y la BUAP, se trabaja en la creación de un Observatorio de Seguridad para contribuir al combate a la delincuencia. La información recabada será puesta a disposición de investigadores universitarios para su análisis y el desarrollo de proyectos que serán compartidos con las autoridades.
El proyecto busca generar diagnósticos basados en evidencia, monitorear patrones delictivos y proponer políticas públicas que fortalezcan la prevención, en un escenario donde la percepción de inseguridad continúa siendo una de las principales preocupaciones de la población poblana.