El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, pidió este martes mantener la serenidad frente a la posible imposición de aranceles del 30% a productos mexicanos fuera del T-MEC, medida que podría entrar en vigor este viernes 1 de agosto.
Desde el evento México IA. Inversión Acelerada, realizado en la Ciudad de México, el funcionario llamó a "no entrar en pánico" y aseguró que el país ya cumplió con las exigencias impuestas por Estados Unidos.
Ebrard reconoció que las negociaciones han sido "intensas" y "complejas", pero afirmó tener una perspectiva positiva ante el desenlace. "A unos días de la presión arancelaria que tenemos. Bueno, en primer lugar, les diría, pues hay que tener sangre fría. Don't panic", expresó durante su intervención ante empresarios y especialistas en tecnología.
La tensión entre ambos países se centra en un posible incremento de aranceles del 25% al 30% por parte del Gobierno de Donald Trump sobre exportaciones mexicanas que no están cubiertas por el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Aunque este nuevo esquema podría entrar en vigor pronto, aún se contempla la posibilidad de una prórroga o una reducción del porcentaje mientras continúan las gestiones diplomáticas.
Ebrard destacó que el 84% del comercio actual con Estados Unidos se encuentra libre de aranceles gracias al T-MEC, lo que protege una parte considerable de las exportaciones mexicanas.
Recordó que el acuerdo firmado en enero pasado ha sido calificado como uno de los mejores del mundo, por lo que espera que se mantenga esa ruta de cooperación. "Ya todo lo que México tenía que hacer está hecho. Ahora tenemos que esperar hoy, mañana y el jueves. Mi perspectiva es positiva", declaró.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes, respaldó el llamado a mantener la calma y afirmó que el sector privado también está trabajando para evitar una afectación mayor. "No estamos con los brazos cruzados. Esperamos que haya una prórroga para seguir negociando", señaló en entrevista con medios de comunicación.
Cervantes también destacó la buena relación que existe entre la presidenta Claudia Sheinbaum y el presidente Donald Trump, lo cual ha permitido que se mantenga una comunicación constante para evitar un conflicto comercial mayor. "Cuando se estira demasiado la liga, llegan esas llamadas que despresurizan muchísimo algunos temas", explicó.
Más allá de las tensiones, ambos líderes coincidieron en que México atraviesa un momento clave. Además del entorno comercial, el país enfrenta una transformación tecnológica acelerada.
En ese sentido, Marcelo Ebrard enfatizó que la economía del futuro estará basada en datos, innovación y talento humano, por lo que México ya trabaja en desarrollar su propio lenguaje de inteligencia artificial como parte de su estrategia de competitividad global.