La Ley Oli es la nueva iniciativa de reforma presentada en 2025 ante el congreso local como Ley de Bienestar Animal del Estado de Querétaro. Su nombre proviene del caso de una burrita llamada "Oli", que fue víctima de un brutal maltrato en el municipio de Cadereyta de Montes: la burra sufrió quemaduras, perdió una pata y quedó sin cría; a pesar de los esfuerzos de rescate, finalmente murió.
La iniciativa fue enviada formalmente al Congreso estatal en julio de 2025 por el gobernador de querétaro. Hasta diciembre de este año, la iniciativa no ha sido aprobada. Incluso el gobernador hizo un llamado a agilizar su proceso legislativo, luego de un segundo caso de maltrato a otro animal de la misma especie de Oli.
Diputados recientemente dieron a conocer que la propuesta será sometida a votación hasta enero de 2026, una vez concluidas las mesas de trabajo con asociaciones, expertos y autoridades municipales.
Se busca que este nuevo marco jurídico reconozca a los animales como seres con dignidad y los proteja del maltrato. La ley actual en Querétaro es limitada: muchas agresiones no se sancionan y las autoridades carecen de herramientas para investigarlas.

Las denuncias ante la unidad de Protección Animal del municipio de Querétaro alcanzan altos volúmenes.
Organizaciones que participaron en la elaboración de la iniciativa han solicitado que la ley no solo se limite a sanciones, sino que incluya programas de rescate, bienestar animal, campañas de educación ciudadana y políticas públicas de protección efectiva.
Además, que se amplíe la protección más allá de mascotas tradicionales (perros, gatos), incluyendo animales de trabajo, fauna silvestre y aquellos usados para actividades de carga o en contextos de explotación.
Ni la actual ley de protección animal actual en Querétaro ni La Ley Oli cubren la tauromaquia ni otras prácticas con animales de espectáculos.