¿Adoptaste un perrito? Conoce la regla 3-3-3

Adoptar a un perro puede ser una de las experiencias más gratificantes, pero también representa un compromiso de tiempo, paciencia y amor.

Por eso, la Agencia de Atención Animal de la Ciudad de México promueve la regla 3-3-3, una guía sencilla que explica cómo se adaptan los perros adoptados durante los primeros meses en su nuevo hogar.

Esta regla señala que, durante los primeros 3 días, es normal que el perro se sienta estresado o confundido. Algunos pueden evitar comer, dormir poco o esconderse. En este tiempo, lo ideal es ofrecerle un lugar tranquilo, limitar el acceso a la casa y no forzarlo a interactuar demasiado. El objetivo es que se relaje y se sienta seguro.

Después, vienen las 3 semanas, un periodo clave para que el perro comience a adaptarse a la rutina del hogar. En este tiempo, se empieza a mostrar su verdadera personalidad: puede jugar, buscar más contacto y explorar con confianza. Es buen momento para reforzar reglas básicas y fortalecer el vínculo con la familia.

A los 3 meses, el perro ya debería sentirse parte del hogar. Para entonces, habrá formado lazos con los miembros de la familia, entenderá mejor lo que se espera de él y su comportamiento será más estable. Si hay problemas de conducta, lo recomendable es acudir con un especialista en comportamiento canino.

La agencia recuerda que este proceso no es igual para todos los perros. Algunos pueden adaptarse más rápido, mientras que otros necesitarán más tiempo. Por eso, destacan que la paciencia y el amor son claves para lograr una convivencia exitosa.

"Adoptar cambia dos vidas: la suya? y la tuya", afirman desde la institución, que promueve la adopción responsable como una forma de ofrecer una segunda oportunidad a miles de animales en situación vulnerable.

Al final, adoptar no solo transforma la vida del perro, también la de quien lo recibe. Con compromiso, tiempo y comprensión, un animal adoptado puede convertirse en el compañero más fiel y amoroso que uno pueda tener.