A pesar de que el nivel del río Lerma disminuyó y los desfogues controlados de la presa Solís tambien han disminuido su volumen, se mantendrá para los próximos días la expectativa, la incertidumbre y la alerta por riesgo de inundación, toda vez que la tarde del lunes la presa Ignacio Allende empezó a ser desfogues de 50 metros cúbicos por segundo.
Arturo Gutiérrez Ceja, Consultor Privado en Materia de Seguridad Social y Protección Civil, señaló que en la emergencia controlada que se vive actualmente en Salamanca, se deben abocar acciones de reforzamiento en las áreas con fallas y en las áreas más bajas del bordo del río Lerma.
El especialista en Seguridad Social y Protección Civil recordó que en la contingencia del 2003, el río Lerma estuvo recibiendo desfogues por 270 metros cúbicos por segundo entre las presas Allende y Solís, las cuales ya están por encima del 100% de su almacenamiento ordinario, señalar que las presas manejan dos niveles: el Ordinario que está por debajo de sus cortinas y el Extraordinario que es el nivel máximo para su operatividad.
Explicó que en estos momentos se está a expensas de lo que la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) decida desfogar, en ese contexto, dijo que las autoridades electas deben involucrarse para conocer a fondo la situación y una vez que tomen posesión de sus cargos puedan dar continuidad inmediata a todas las acciones que se implementan.