Contrario a lo que muchas personas creen, llevar una dieta saludable y sostenible en México no representa un mayor gasto económico, de hecho, puede resultar hasta un 40% más barata que la dieta promedio actual. Así lo revela un estudio del Centro de Investigación en Nutrición y Salud, en el que se compararon los costos de las canastas alimentarias comunes en el país con los estándares propuestos por la Comisión EAT-Lancet para una alimentación saludable y sostenible.
Por ejemplo, mientras una dieta basada en productos procesados y bebidas azucaradas puede costar hasta $120 pesos diarios, una alimentación rica en frutas, verduras, granos y leguminosas puede reducir ese gasto a $72 pesos al día, representando un ahorro de aproximadamente $1,400 pesos al mes para una familia de cuatro personas.
Los resultados destacan que para lograr este cambio alimenticio se requiere incrementar el consumo diario de frutas, verduras, granos, leguminosas y oleaginosas, mientras que es fundamental reducir el consumo de proteínas de origen animal, bebidas azucaradas y productos chatarra, los cuales abundan en la dieta del mexicano promedio.
Además del beneficio económico, esta transformación alimentaria representa una mejora significativa en la salud. Sustituir alimentos ultraprocesados por opciones naturales ayuda a prevenir enfermedades y favorece el bienestar general.