En Abril los contribuyentes deben presentar su declaración anual de impuestos ante el Servicio de Administración Tributaria. Bajo un esquema totalmente digital, el organismo ha simplificado el proceso para facilitar el cumplimiento de esta obligación fiscal.
Los contribuyentes deben ingresar al portal del SAT con su RFC y contraseña o e.firma, donde el sistema precarga la información fiscal: ingresos por nómina, retenciones y, en su caso, facturas electrónicas de deducciones personales como gastos médicos, colegiaturas y aportaciones voluntarias a la AFORE. Una vez verificados y complementados los datos, el contribuyente envía la declaración y obtiene un acuse digital que acredita el trámite.
Entre los beneficios de declarar en tiempo y forma destacan la devolución de saldos a favor y un historial fiscal limpio que favorece trámites bancarios, solicitudes de visa y accesos a programas de créditos o subsidios gubernamentales.
En contraste, quienes incumplan con la presentación o paguen fuera del plazo pueden enfrentar multas que oscilan entre $1,680 y $42,550, más recargos diarios e intereses anuales sobre el monto adeudado. Asimismo, perderán la posibilidad de recuperar saldos a favor y podrían ver restringido su acceso a productos financieros y trámites oficiales que exijan constancia de declaración.
Con el cierre de la ventana de declaración acercándose, el SAT exhorta a los contribuyentes a recopilar sus comprobantes fiscales y aprovechar las herramientas en línea para cumplir puntualmente con sus obligaciones y optimizar su situación financiera.