Es importante alcanzar un equilibrio en los cargos públicos, priorizando a las personas más aptas sin importar su género, fueron las palabras del Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz.
En referencia al «tiempo de las mujeres», instó a evitar actitudes misóginas y a trabajar unidos, valorando la capacidad de cada persona para liderar, un municipio, un estado o un país, pues la capacidad la tienen todos por igual.
Es como un péndulo que se va haciendo. Si un tiempo estuvo muy discriminada la mujer, ahora se quiere poner en todo a la mujer. Se tiene que llegar a un sano equilibrio y buscar, no hombre o mujer, sino la persona más apta para los puestos públicos, para las responsabilidades, fueron las palabras del prelado.
Enrique Díaz Díaz destacó que es necesario reconocer el papel fundamental de las mujeres, pero sin caer en extremos, buscando siempre la mejor opción para dirigir los destinos de la comunidad. Aunque reconoció la elección donde las mujeres se consolidación como las ganadoras contundentes, agregó que de igual manera se trabajará con ellas para que lo mejor venga para los ciudadanos.