Las y los usuarios de HSBC en la Costa de Oaxaca enfrentan complicaciones tras el cierre inesperado de las sucursales de Puerto Escondido y Salina Cruz, cuyos servicios fueron trasladados sin previo aviso a Bahías de Huatulco.
Durante el fin de semana, clientes que acudieron a realizar trámites se encontraron con las puertas cerradas y sin información oficial disponible. La falta de anuncio previo generó inconformidad entre habitantes, comerciantes y personas trabajadoras del sector turístico, quienes dependen de la atención bancaria presencial para sus actividades cotidianas.
Con este cambio, quienes requieran realizar depósitos, retiros, aclaraciones, trámites de tarjetas o cualquier operación financiera deberán recorrer más de una hora para llegar a la sucursal de Huatulco, la única disponible actualmente en la zona.
La medida ha sido considerada un retroceso para la prestación de servicios financieros en una región donde el flujo turístico y comercial demanda atención constante. Además, la ausencia de un comunicado por parte de HSBC aumenta la incertidumbre entre los usuarios, especialmente aquellos que no cuentan con opciones digitales o requieren servicios que solo pueden gestionarse de manera presencial.