Los enfrentamientos entre Santiago Amoltepec y Santa María Zaniza, en la Sierra Sur de Oaxaca, mantienen suspendidas las clases en todos los niveles básicos y medios. La Sección 22 del magisterio confirmó que la inseguridad en la zona obliga a detener actividades escolares, afectando directamente la educación y seguridad de la niñez.
En Santa María Zaniza se quedaron sin clases 1,050 estudiantes, mientras que en Santiago Amoltepec son más de 2 mil alumnos los que no han podido regresar a las aulas. Entre ellos se encuentran niñas y niños de primaria, preescolar, telesecundaria y secundaria técnica.
El magisterio advirtió que la situación representa un fuerte riesgo emocional y académico, pues los estudiantes acumulan rezago escolar. El portavoz sindical, Luis Alberto López Pazos, lamentó que la violencia sea usada como medio para resolver diferencias y reiteró que la solución debe darse mediante el diálogo.
Además, señaló que los docentes hacen esfuerzos por permanecer semanas enteras en comunidades apartadas para atender a la niñez, pero reconoció que la situación ha rebasado sus posibilidades.
En medio de este panorama, el magisterio exigió a las autoridades locales y estatales que intervengan de inmediato para restablecer la paz y garantizar condiciones mínimas de seguridad.
El conflicto agrario entre ambas comunidades volvió a estallar el fin de semana pasado, cuando un choque armado dejó dos personas heridas y una desaparecida, lo que reavivó la tensión en la región y mantiene en riesgo el futuro escolar de miles de niñas y niños.