En febrero de 2022, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció la "federalización" de los sistemas estatales de salud mediante el programa IMSS-Bienestar. Esto significa que, mediante acuerdos de colaboración, las entidades federativas cederán su infraestructura física y humana al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para que, a través de él, se otorguen los servicios de salud a la población sin seguridad social.
A más de 2 años de dicho proceso, los avances de la última apuesta gubernamental para garantizar el acceso a la salud de calidad, sigue sin mostrar resultados tangibles en entidades con alta necesidad como Oaxaca.
Fue el pasado 4 de junio, cuando se inició la dispersión de recursos del programa La Clínica es Nuestra para rehabilitar, modernizar y equipar 11 mil 947 unidades médicas de primer nivel de atención en las comunidades más apartadas.
En el caso específico de Oaxaca, 433 millones de pesos se destinarán directamente a la mejora del sistema de salud comunitario en la entidad, distribuidos en 944 comités, recibiendo de 400 mil a 1 millón 200 mil pesos.
En marzo del presente año, Oaxaca fue sede de la Reunión Nacional de los Coordinadores Estatales de los Servicios de Salud del IMSS-Bienestar, donde se anunciaron avances en el proceso de federalización del sistema de salud; entre estos, se destacó la contratado a personal médico y de enfermería, así como la basificación de personal de salud, alrededor de 85 mil personas trabajadoras de los servicios de salud en 23 entidades federativas (11 mil centros de salud y 423 hospitales de todo país).
De los logros en Oaxaca, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, destacó la puesta en operación del Hospital General de la Mujer y el Niño Oaxaqueño.
Los reportes 2024, de los Servicio de Salud de Oaxaca refieren que en el primer trimestre, se han invertido en modernización 525 millones de pesos y en equipamiento, ya se han destinado 771 millones de pesos en 15 mil 934 equipos.
Cifras que sin duda, en palabra son positivas y dan proyección de un cambio en beneficio de la población, sin embargo, son el las clínicas y hospitales, donde las denuncias y quejas por falta de equipos, médicos y medicinas, no cesan.
La interrogante ahora es ¿Cuánto tiempo más tendrá que pasar para logar una atención universal de salud en Oaxaca? ¿Cuándo tendrán efectos las inversiones millonarias? Más de 5 años han pasado y la deuda en salud permanece, los números ahí están, las inversiones se reconocen, pero los resultados, ahí está el problema.