Entre 1990 y 2025, al menos siete huracanes de gran intensidad han impactado directamente la costa de Oaxaca, dejando a su paso miles de damnificados y enormes retos en infraestructura. De acuerdo con la Coordinación Estatal de Protección Civil, los más devastadores han sido Paulina en 1997 y Agatha en 2022. Paulina, que ingresó entre Puerto Escondido y Puerto Ángel como categoría 3, tras haber alcanzado categoría 4 en altamar, dejó 228 muertos, más de 250 mil personas sin hogar y afectaciones en más de mil 200 comunidades. Agatha, por su parte, tocó tierra el 30 de mayo de 2022 como categoría 2, provocando 10 muertes, 20 desaparecidos y severos daños en al menos 60 localidades de la región Costa y Sierra Sur.
Otros huracanes relevantes incluyen a Frank, que en agosto de 2010 rozó la costa como categoría 1 y dejó cinco muertos y más de 60 mil damnificados, impulsando la formalización del Plan DN-III-E y nuevos protocolos de evacuación exprés. En junio de 2012, Carlotta tocó tierra en Puerto Escondido como categoría 2, dañando 11 mil 500 viviendas en 30 municipios. Un año después, el 29 de mayo de 2013, Bárbara ingresó por San Pedro Tapanatepec como categoría 1, provocando la muerte de dos personas e inundaciones en 12 comunidades.
Más recientemente, el huracán John impactó el 24 de septiembre de 2024 como categoría 3, dejando tres muertos en Oaxaca, afectaciones a más de 127 mil personas y suspensión de clases y electricidad en decenas de municipios. Finalmente, en junio de 2025, Erick tocó tierra en Pinotepa Nacional también como categoría 3. Gracias a la activación temprana de alertas y al despliegue de más de 30 mil elementos, no se registraron muertes, aunque los daños materiales fueron valuados en al menos 2 mil millones de pesos.
A diferencia de Veracruz o Quintana Roo, donde se garantiza mayor presupuesto anual para infraestructura, en el estado oaxaqueño persisten retos en coberturas de telefonía y caminos rurales, lo que retrasa la ayuda. En los últimos cinco años, Oaxaca ha fortalecido sus planes de contingencia con inversiones federales y estatales un 30 % más de presupuesto en Protección Civil y simulacros trimestrales en las 60 comunidades costeras más expuestas.