Un verdadero caos se vivió en Walmart de Salina Cruz luego de que decenas de personas acudieran tras difundirse que las pantallas Philips se vendían en 300 pesos, debido a un supuesto "error de sistema".
El aviso de las súper ofertas en distintos departamentos generó largas filas y discusiones entre clientes y personal de la tienda, pues los compradores exigieron que se respetara el precio exhibido.
La sucursal argumentó que se trataba de una equivocación en su sistema de etiquetado, mientras que los consumidores advirtieron que, de acuerdo con la ley, la empresa debe cumplir con el precio anunciado.
El hecho rápidamente se viralizó en redes sociales, donde usuarios compartieron fotos y videos del desorden, reavivando el debate sobre los derechos del consumidor y las responsabilidades de las cadenas comerciales.