La mayoría de las policías del país trabajan escenarios complejos, entre horarios extenuantes, prestaciones limitadas, salarios bajos, falta de capacitación, sin herramientas, equipos e instalaciones para efectuar su trabajo de forma adecuada.
En Oaxaca, solamente 12 de cada 100 policías estatales e integrantes de la Guardia Nacional cuentan con el Certificado Único Policial (CUP), colocando a la entidad en el penúltimo lugar de cumplimiento de este requisito.
De forma contraria, el Censo Nacional de Seguridad Pública Federal y Estatal (CNSPF-E), coloca a Oaxaca como el segundo estado con mayor cantidad de elementos estatales por cada mil habitantes, 1.6 por cada mil.
En 2023, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Oaxaca, destacó la necesidad de contracción promedio de 250 elementos policiacos al año, siendo necesario un incentivo, aumento salarial, por lo que para este 2025 las autoridades estatales reportaron un incremento de 17.4%, alcanzando 13 mil 257 pesos mensuales para policías estatales, contrastantemente, en ciudades como Guanajuato, Nuevo León y Jalisco, el salario mensual promedio oscina entres los 25 mil y 27 mil pesos, dejando el sueldo de los policías de Oaxaca, entre los menos competitivos.
Panorama que se complica, con la falta de capacitación y portación de armas para hacer frente a los hechos delictivos, la titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública (SESESP), Karina Barón Ortiz, informó que de 153 municipios que se rigen por partidos políticos 108 no cuentan con algún policía que esté capacitado para portar un arma, dejándolos vulnerables ante la delincuencia y de paso a la población.
De acuerdo a la organización Causa en Común, en los últimos 5 años, 63 policías han sido asesinado en Oaxaca, 11 en lo que va de este 2025, mientras que a nivel nacional son 312 víctimas, exponiendo la crisis policial que atraviesa el estado y el país, mientras la violencia se expande y la delincuencia crece, la seguridad localmente queda desbordada y vulnerable.