México se enfrenta a una preocupante crisis por la disminución constante de nacimientos, lo que podría llevar a una población envejecida, impactando en la fuerza laboral joven y en las pensiones (qué y cómo podrían sostenerse los adultos mayores), afectando al crecimiento económico; y es también una causa de la crisis de vivienda (por asequibilidad), junto con el desempleo y la precariedad laboral.
Por ejemplo, mientras que en 1960 la tasa de natalidad en México era de 6.76 hijos por mujer, para 2023 fue de apenas 1.91. Por ejemplo, en el estado de Puebla durante 2024 nacieron 14 mil 101, 2 mil 662 en el municipio de Tehuacán, de acuerdo con datos del INEG.
"Las casas en el futuro tienen que estar pensadas en ese sentido de las cosas, que tienen que ir evolucionando con las familias", puntualizó Miguel Antonio Mascarua, Especialista en Economía y Desarrollo de Proyectos.
Ahora bien, las nuevas generaciones al venir desprovistas de seguro social, de una pensión para la vejez y al enfrentarse a un encarecimiento en el costo de la vida, cada vez más jóvenes deciden no tener hijos, lo que impacta en la preferencia y oportunidad de viviendas.
"En Tehuacán a muchos jóvenes se les hace fácil ser roomies, ser amigos con derechos, que los lleva a vivir juntos y un departamento revuelve muy bien el problema, hasta que nace el primer hijo, un segundo hijo como sea se acomodan, pero ya un tercer hijo se vuelve incomodo, al ser un espacio pequeño y asfixiante", detalló Mascarua.
"Hoy en día, matrimonios o parejas muy jóvenes son las que buscan departamento, y si algún joven tiene la oportunidad de hacerse de un bien de este tipo, y mientras no tenga una pareja estable, la tendencia es buscar un romí, rentarle una habitación y dividirse los gastos, porque si bien es el departamento también es todo lo que conlleva", puntualizó Jaime Trujillo, Agente Inmobiliario desde hace 25 años.
En Tehuacán hace 8 o 10 años las familias eran muy tradicionales, actualmente los modelos han cambiado y las necesidades, así como las preferencias de vivienda también; considerando que hasta el 2020 a nivel local el rango etario que concentró mayor población fueron los jóvenes de 15 a 19 años (15 mil 810), así como el sector de 20 a 24 años (15 mil 390).
"En la actualidad también hay muchas parejas que no logran mantener una relación de más de 5 o 6 años, entonces cada uno se va para su lado y esto es más demanda de viviendas y más presión para la construcción de edificios", finalizó Mascarua.
Entre la población joven, la búsqueda de viviendas obedece a la satisfacción de sus necesidades a corto plazo; sin embrago estas decisiones deben contemplar variantes como el crecimiento de la familia.
Y aunque el acceso para jóvenes de créditos y/o prestamos de instituciones para el acceso a la vivienda, es complejo, resulta importante que busquen asesoría con profesionales en el rubro, para evitar caer en fraudes o estafas.