Wilfrido Montero: maestro cartonero y otras artes, herencia artística

Pese a las nuevas formas de vida, la implementación de las nuevas tecnologías, la introducción de culturas extranjeras e importación en masa de mercancías de otros países, el arte mexicano a través de la cartonería sigue presente, incluso a través de mentes jóvenes e innovadoras, que no sola la practican sino también la enseñan y fomentan, como el caso del maestro cartonero Wilfrido Montero. Aunque es psicólogo por formación, con familia paterna dedicada al canto y a la música, y familia materna dedicada a elaborar las jaulas y otros accesorios para la crianza y reproducción de las aves canoras y de ornato, Wilfrido ha estado rodeado toda su vida de actividades artísticas, por lo que su don en la cartonería y otras técnicas que desempeña es parte de su herencia familiar. Así su pasión y talento en el arte, no fue un descubrimiento, sino algo que desarrollo de forma natural.

Desde hace 10 años Wilfrido se ha desempeñado en el arte y vivido de él, y no solo de cartonería, pues desde los 15 años sus propios maestros le dieron la oportunidad de enseñar danzón, además ya cuenta con reconocimientos estatales y nacionales en pintura y dibujo, esto le ha abierto muchas puertas y permitido transmitir ese conocimiento a más generaciones.

Actualmente Wilfrido tiene a su cargo como instructor, el grupo de danzón en el Complejo Cultural El Carmen, da clases de cartonería y pintura en el colectivo Noyolotzin, en la estancia de día del DIF y en una librería, sigue investigando, aprendiendo y capacitándose, convirtiendo el arte es su estilo de vida.

Además, metafóricamente se ve a sí mismo como una rama, que puede expandirse y dar ramitas y frutos, es decir formar nuevos artistas ensañando arte.