Integrantes del movimiento en defensa de la Ciudad de las Artes acusaron al Gobierno del Estado de romper los acuerdos alcanzados en la mesa de diálogo sostenida la noche anterior; denunciaron que esta mañana se les notificó un cambio unilateral en los términos pactados, como el lugar de la reunión programada y consideran esto una traición a la buena fe mostrada por la ciudadanía.
Los compromisos incumplidos incluyen la suspensión de la tala de arboles, que continuó este martes, el cambio de sede de las mesas de trabajo y el retiro de la presencia policial; aseguran que, lejos de disminuir, la vigilancia se intensificó con rondines y la llegada de elementos de la Agencia de Investigación Criminal, también denunciaron agresiones físicas a algunos manifestantes.
Los activistas recalcaron que la protesta ha sido pacífica desde el inicio y exigieron garantías de seguridad y respeto a los derechos humanos; señalaron que, en lugar de promover el diálogo, las autoridades respondan con intimidación y hostigamiento y consideran excesiva la presencia de cuerpos policiacos en una manifestación cultural.
Entre sus exigencias están:
"El arte y la vida se defienden", afirmaron los manifestantes; reiteraron que no darán un paso atrás en la defensa del espacio público y llamaron a la sociedad a informarse, sumarse y no permitir la privatización ni destrucción de un bien común.