Durante los primeros días de diciembre, un amplio operativo de seguridad dejó al descubierto la dimensión de las actividades delictivas que operaban en distintos municipios de Nayarit. En acciones coordinadas entre fuerzas federales y estatales, se logró el aseguramiento de grandes cantidades de droga, armamento, explosivos y equipo táctico, así como la desarticulación de un laboratorio clandestino y varios campamentos improvisados utilizados presuntamente por grupos criminales.

Entre el 1 y el 12 de diciembre, los operativos realizados en diferentes puntos del estado permitieron decomisar más de 64 kilos de marihuana, más de 38 kilos de cristal, 22.5 kilos de metanfetamina, 10 kilos de hachís y diversas dosis de cocaína. Además, se localizaron 131 dosis y 131 cigarros de marihuana, así como 96 dosis de cristal, lo que evidencia tanto la producción como la distribución de estupefacientes en la entidad.

Las acciones también derivaron en el aseguramiento de un importante arsenal. En el recuento destacan armas largas y cortas, más de 2 mil 900 cartuchos de distintos calibres, 54 cargadores, chalecos tácticos, placas balísticas, radios de comunicación y dos granadas de mano. A esto se suman seis artefactos explosivos improvisados, cuatro campamentos clandestinos y 46 máquinas tragamonedas, presuntamente utilizadas para actividades ilícitas, así como dos vehículos vinculados a las investigaciones.

Como resultado de estos operativos, una persona fue detenida y puesta a disposición de las autoridades competentes junto con los indicios asegurados, incluido el laboratorio clandestino. Las investigaciones continúan para determinar responsabilidades y posibles vínculos con otras células delictivas. Para analistas en seguridad, este tipo de aseguramientos no solo representan un golpe logístico al crimen organizado, sino que también dejan en evidencia la necesidad de mantener operativos constantes y coordinados para frenar la violencia y reducir la circulación de drogas y armas en Nayarit.
