Hombres se enfrentan a una violencia más silenciosa

La violencia contra los hombres es un fenómeno subestimado y poco visibilizado, que abarca agresiones físicas, psicológicas, sexuales y económicas, principalmente en el entorno familiar y de pareja, se calla debido al el estigma social, la incredulidad y el miedo al ridículo.

"Un trabajador, cuando llegamos ahí nosotros no sabíamos que él sufría de violencia, nos dimos cuenta y lo rescatamos, literal para que viviera en un espacio diferente, y sobre todo le ayudamos con sus juicioso para que llevara a cabo el procedimiento de divorcio". -Margarita Morán, directora del Instituto para la Mujer Nayarita (INMUNAY)

En Nayarit, un caso reciente atendido de manera anónima por el Instituto para la Mujer Nayarita (INMUNAY) puso sobre la mesa esta problemática.

"Nosotros hemos atendido hombres, mujeres; víctimas de violencia, la verdad es que teníamos uno propiamente en el INMUNAY (03:30)// (04:15) quitan el derecho de que los niños no los vean, ese tipo de violencia es el que más a nosotras nos llega". -Margarita Morán, directora del Instituto para la Mujer Nayarita (INMUNAY)

Las instituciones aunque en menor cantidad también reportan atender a hombres víctimas de violencia, y que en muchos casos, el maltrato se manifiesta mediante la manipulación de los hijos o el control económico.

"Ya no tenía custodia porque sus hijos están grandes, están en la universidad pero estaban estudiando, entonces él seguía con la obligación de la pensión alimenticia". -Margarita Morán, directora del Instituto para la Mujer Nayarita (INMUNAY)

De acuerdo con datos del INEGI, en la última década se han registrado más de 120 mil homicidios en México, de los cuales 18 mil 293 corresponden a hombres en contextos de violencia doméstica o de pareja.

A nivel nacional, uno de cada cuatro casos de violencia familiar involucra a hombres maltratados. La violencia contra los hombres existe, es real y creciente, pero sigue envuelta en el silencio y la vergüenza, lo que hace plantear la interrogante, ¿hasta dónde es posible aguantar por temor al qué dirán?...