¿Qué concepto sueles poner cuando haces una transferencia? ¿"Pago", "préstamo", "para ti"? Aunque algunos usuarios lo ignoran o lo usan de forma irónica y parezca un detalle menor, esta simple acción puede marcar la diferencia entre una operación común y un foco rojo para el Servicio de Administración Tributaria.
"Para empezar, desde la persona que lo envía, como la persona que lo recibe, puede ser perjudicial" Araceli Amaro, Contadora
Los conceptos relacionados con actividades ilegales, productos prohibidos o lenguaje vulgar pueden ser interpretados como ingresos informales o no declarados. Aún si la intención es hacer una broma, el sistema fiscal no siempre lo percibe así. En consecuencia, el receptor podría enfrentar auditorías o incluso tener que pagar impuestos no previstos, como el IVA.
"Cualquier concepto que tenga algo ilícito, llámese lo que mencionabas ahorita droga, algo relacionado a prostitución" "Preferible no hacerlo para no meternos en problemas" Araceli Amaro, Contadora
Existen formas correctas de registrar una transferencia, frases como
Además del concepto, el monto también es un factor clave. Cuando una persona que recibe ingresos bajos o está registrada como asalariada empieza a recibir transferencias altas y frecuentes, se generan alertas automáticas. Por ello, es importante que las transferencias sean proporcionales a la actividad económica del receptor y estén bien justificadas.
"Ya el SAT si te dice así como de, ¿qué onda? ¿Por qué recibiste 50 mil pesos?" Araceli Amaro, Contadora
Aunque parezca un detalle menor, el concepto en una transferencia bancaria puede tener consecuencias fiscales. Usar términos adecuados y proporcionales a la actividad del receptor no solo evita malentendidos, sino también revisiones del SAT o pagos inesperados. Lo mejor: claridad, formalidad y evitar cualquier término que pueda ser malinterpretado.