De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, los lugares donde los mexiquenses se sienten más inseguros son: cajeros automáticos con el 78.4 por ciento, transporte público con 71.2 por ciento, bancos con 63.4 por ciento y las calles que regularmente usan con un 59.2 por ciento.
Así, al ser cajeros y bancos el lugar donde cientos de mexiquenses acuden a disponer de su dinero, se vuelve un blanco prioritario para la delincuencia.
El modus operandi de los delincuentes consiste en observar a su víctima, si va sola o acompañada, si ha llegado en un vehículo o a pie, para después seguirla y metros más adelante interceptarla para despojar del usuario el dinero retirado, tarjetas e identificaciones.
Expertos explican que el incremento en robos con violencia se da por la incapacidad de las autoridades de brindar seguridad.
Además de que las políticas públicas se encaminan a castigar un delito, no a prevenirlo.
Por lo que autoridades piden que al acudir a un cajero a retirar dinero, la población debe estar alerta en todo momento, no debe aceptar ayuda de desconocidos y en caso de notar comportamientos sospechosos, reportarlo a elementos de policía.