Las casas de empeño en la capital mexiquense presentan una disminución significativa de clientes, esto a escasos días de haber iniciado el año y con ello la cuesta de enero, este tipo de lugares en años anteriores solían verse abarrotadas de toluqueños empeñando artículos.
En un recorrido por el centro de la capital mexiquense se pudo observar que muy pocos toluqueños se acercan a estos establecimientos.
Algunos toluqueños refirieron que la experiencia de empeñar un artículo es muy desagradable, porque si no se cumple con el pago en el tiempo acordado imposibilita la recuperación de los objetos y en muchas ocasiones su valor aumenta, por lo que prefieren ajustar sus gastos de fin de año para no pasar por alguna mala racha económica.
Los encargados de estos establecimientos aseguraron que durante estos días, a pesar de experimentar poca afluencia, los artículos que llegan a recibir son electrónicos como celulares y consolas de videojuegos, que en muchos casos las personas que empeñan ya no se interesan por recuperarlos, esto porque renovaron algún artículo a fin de año.
"Tecnología casi no se devalúa, mantiene su precio, devalúa muy poco como son artículos muy necesarios, pierde muy poco su valor". Fueron las palabras de un encargado de una casa de empeño.