La fe es un componente central dentro de la vida del mexicano, y la Semana Santa representa el pináculo que enarbola la devoción y la expresión religiosa en el país.
El Santuario del Señor de Chalma, erigido por frailes agustinos en el siglo XVI, se ha convertido en uno de los epicentros del turismo religioso. Es el TERCER DESTINO TURÍSTICO MÁS POPULAR EN EL ESTADO, que recibe en Semana Santa a más de 30 mil personas.
El turismo religioso genera beneficios económicos. Datos de la Secretaría de Cultura Turismo del Estado de México señalan que 80 MIL EMPLEOS DIRECTOS E INDIRECTOS SE GENERAN EN TORNO AL SANTUARIO DE CHALMA, en rubros como la venta de artesanías y recuerdos hasta la prestación de servicios de alojamiento y alimentación.
Según cifras de la Cámara Nacional de Comercio, en la Semana Santa se genera una derrama económica de 7 mil millones de pesos en el Estado de México, siendo el turismo religioso directamente responsable de 10% de estos ingresos.
Peregrinos de distintos puntos de la República recorren kilómetros a pie, algunos incluso descalzos, como acto de penitencia y sacrificio, con el único objetivo de tener un contacto con esta divina figura, venerada por su poder sanador y milagroso.
El Santuario del Señor de Chalma es un espacio de encuentro con la fe, la historia y la cultura. Es el mayor destino de turismo religioso en la entidad mexiquense, especialmente en la semana mayor.