La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó este 1 de diciembre que el Gobierno federal destinará en 2026 casi un billón de pesos para pensiones y programas sociales.
Durante su conferencia de prensa matutina, aseguró que esta inversión refleja la prioridad de su administración: llevar apoyo directo a las personas que más lo necesitan. Para dimensionar la cifra, un billón equivale a 1 millón de millones, es decir, un número tan grande que, como ejemplo, permitiría entregar 1,000 becas de 10 mil pesos cada una al día durante casi 27 años.
La mandataria recordó que en el año actual la inversión en programas sociales alcanzó 850 mil millones de pesos, recursos que (dijo) se entregan sin intermediarios. Explicó que, a diferencia de gobiernos anteriores, hoy no se pide a nadie que "muestre su afiliación política" para recibir un apoyo. "Los recursos van directo a la gente", aseguró, destacando que la mayoría de los programas actuales son universales, es decir, llegan por igual a cualquier persona que cumpla los requisitos.
Sheinbaum subrayó que el aumento en el presupuesto social ha sido posible gracias a una mayor recaudación. Este año, la recaudación adicional ha sido cercana a 400 mil millones de pesos. Para ponerlo en contexto, comparó esta cifra con un dato internacional: "¿Saben cuánto pidió Argentina de préstamo a Estados Unidos? Ese monto". Es decir, lo que para un país representa una deuda completa, México lo obtuvo como ingreso extraordinario.

Una parte importante de esa recaudación provino de las aduanas, que aportaron 250 mil millones de pesos adicionales sin necesidad de subir impuestos. Esto significa, en palabras simples, que el Gobierno obtuvo más ingresos por inspeccionar mejor, cerrar fugas y evitar prácticas ilegales, no porque la población pagara más. Por ejemplo, si antes una importación que debía pagar 100 pesos solo declaraba 70, ahora la autoridad está cobrando los 100 completos.
La presidenta también señaló que el avance en materia fiscal continuará. Recordó que recientemente se aprobaron leyes para cerrar el paso a las factureras, empresas que simulan gastos y reducen ilegalmente el pago de impuestos. Con estas medidas (dijo) se espera mantener una recaudación sólida que permita alcanzar la meta del billón de pesos destinado a programas sociales en 2026.
Sheinbaum insistió en que estos recursos buscan "ayudar a la gente y apoyar al que menos tiene". Señaló que esta inversión no solo entrega dinero, sino que construye derechos sociales. Como ejemplo, mencionó que una persona adulta mayor que recibe una pensión mensual no solo obtiene un apoyo económico, sino la garantía de seguridad básica para enfrentar gastos como comida, medicinas o transporte.
Finalmente, la mandataria afirmó que este enfoque explica, en su opinión, el respaldo ciudadano hacia los gobiernos de la llamada 4T. "Y luego se preguntan por qué tanto apoyo", dijo, reiterando que cuando los recursos llegan directamente a los hogares, la población puede ver resultados que impactan su vida cotidiana. Para muchas familias, añadió, un programa social puede significar la diferencia entre tener ingresos suficientes o no.