El Congreso del Estado de México aprobó por unanimidad una reforma al Código Penal que clasifica la tala clandestina como delito grave. Esta medida busca fortalecer las sanciones contra quienes afecten los recursos forestales del estado, que se posiciona como el quinto a nivel nacional en delitos ambientales.
La reforma tiene como propósito principal endurecer las penas para los responsables de la explotación ilegal de recursos forestales. De acuerdo con el artículo 229 del Código Penal, las personas que participen en actividades como la transportación, almacenamiento, distribución, comercialización o destrucción de productos forestales sin autorización enfrentarán penas de entre 10 y 20 años de prisión, así como multas de mil a mil 500 días de salario.
Esta iniciativa surge ante la crítica situación ambiental en el Estado de México, donde 25 municipios presentan alerta roja por delitos ambientales y se han perdido tres mil 200 hectáreas de bosque en zonas como Ocuilan y Temascaltepec, entre otras