En el Estado de México, se lidia diariamente con la contaminación y una pésima calidad del aire. Ante esta situación existen personas y organizaciones que han recurrido a los tribunales para dar un paso en el combate de la crisis climática.
Este recurso, son los litigios climáticos, que se han convertido en una solución innovadora, que busca transformar la dinámica de lucha contra el cambio climático.
Los litigios climáticos buscan un cambio en la sociedad, pero también responsabilizar a gobiernos, autoridades, empresas y a otros actores no estatales por la crisis climática ante los tribunales, obligandolos a la implementación y aumento progresivo de medidas concretas para frenar sus emisiones y así mitigar los impactos de la crisis climática.
Datos de la Plataforma de Litigio Climático para América Latina y el Caribe, en México se han interpuesto 19 litigios climáticos, uno de ellos en el Estado de México.
El 12 de junio de 2019 la organización Greenpeace México promovió un amparo en contra del Programa para Atención de Contingencias Ambientales Atmosféricas en la Zona Metropolitana del Valle de Toluca y la Zona Metropolitana de Santiago Tianguistenco emitido por la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del Estado México, ya que él mismo viola el derecho humano al ambiente sano al incumplir con las Normas Oficiales Mexicanas NOM-020-SSA1-2014 Salud ambiental.
La implementación se llevará a cabo el 18 de febrero del 2022 donde se publicó en la Gaceta del Gobierno del Estado de México el Programa para la Atención de Contingencias Ambientales Atmosféricas en la Zona Metropolitana del Valle de Toluca y la Zona Metropolitana de Santiago Tianguistenco.
Estos litigios han funcionado como vínculo entre los derechos humanos y él cambio climático, logrando proteger a los más vulnerables, también creando conciencia entre la sociedad y las repercusiones de sus actos contra el medio ambiente.