Durante los meses de marzo y abril los incendios forestales se incrementan en el estado de México por el comienzo de la época de estiaje, donde no hay lluvia y disminuye la cantidad de agua en los lagos, ríos y presas situando a la entidad en una temporada de sequía.
Muchos agricultores en esta época consideran que la quema agrícola es la forma más eficaz y rentable de limpiar la tierra, fertilizarla y prepararla para una nueva plantación. Sin embargo, estas quemas pueden provocar incendios a gran escala o llamados forestales.
Los municipios donde se dan más incendios son Valle de Bravo, Ixtapaluca, Ocuilan, Nicolás Romero y Acambay y con mayor afectación están Jilotzingo, Amecameca, Lerma, Tenango del Valle e Ixtapaluca.