Hasta hace no mucho, llegar a los 30 años sin casa, terreno o al menos un departamento en renta estable, era visto como un desliz, una señal de que algo había salido mal en el camino.
En el Valle de Toluca, con la llegada del Tren Interurbano México-, los precios de la vivienda se han disparado, especialmente en municipios como Lerma y Metepec. Ahí, el valor de los inmuebles ha subido hasta un 30% en zonas cercanas a las estaciones del tren. Además, se ha registrado un incremento del 20% en la demanda habitacional.
Según el más reciente reporte de la Sociedad Hipotecaria Federal, solo en el primer trimestre de 2025, los precios de casas y departamentos en México aumentaron un 8.2% respecto al mismo periodo del año anterior. El precio promedio de una vivienda adquirida con crédito ronda ya el millón 859 mil pesos, cifra lejana para la mayoría de los trabajadores en el país.
Y es que de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, el ingreso mensual promedio de un trabajador formal es de apenas 18 mil 657 pesos.
En el caso del alquiler, el panorama tampoco ofrece respiro. En el Valle de Toluca, las rentas han crecido de forma sostenida durante los últimos cinco años.
Hoy, se pueden encontrar cuartos para estudiantes por 2,000 pesos mensuales, pero en desarrollos habitacionales exclusivos, la renta alcanza los 25,000 pesos. Una cifra que para muchos no solo es inalcanzable, sino también desproporcionada frente a los servicios y espacios ofrecidos.
De acuerdo con el estudio "Monitor de Vivienda" de Ipsos, siete de cada 10 mexicanos consideran que es más difícil para las personas de su edad adquirir o rentar una vivienda que para la generación de sus padres. Y aunque el 76% de los encuestados aún sueña con tener casa propia, el 68% admite sentir miedo de no lograrlo jamás.